Cuenta la leyenda que un niño alegre y curioso vuela por la noche

por las ciudades del mundo rociando arena mágica, alentando e inspirando

 hermosos sueños a todos sus habitantes.

 

El niño se va de soñador en soñador, de sueño en sueño, deslizándose y pasando a través de los sueños, haciendo que cada uno de ellos sea único y diferente.

Hasta que el soñador despierta , sorprendido de qué tan real parecía parecía sueño.

 

Y cuando el Sandchild termina de llenar a la gente del mundo de sonrisas, sueños y esperanzas, vuelan de regreso en su alfombra mágica a su hogar,

de regreso al Sandland, la tierra mágica en la que se crean los sueños.

Y allí, día a día, el Sandchild crea la arena mágica

forjada por sueños increíbles e historias fantásticas

que llenan de magia no solo su tierra, sino también nuestro mundo.

 

Y aunque la gente piensa que los sueños no son reales

solo porque no están hechos de materia o de partículas,

pero los sueños son tan reales como cualquier otra cosa.

 

Porque en Sandland el Sandchild los forja no a partir de la materia

sino dede imágenes, de recuerdos y esperanzas.